¿Sabías que la recolección de esta madera sagrada es muy variada?
Es una actividad realizada de forma ancestral para uso en el hogar.
La mayoría de las familias de las comunidades lo siguen utilizando para ahuyentar los moquitos o como combustible en la cocina y para limpiar la casa de las malas energías.
En las década de los año 70 esta actividad se realizó de manera comercial, al final de los años 90 con la llegada de los repelente químicos se terminó la demanda de ese producto.
En la actualidad esta actividad continúa como en el uso en el hogar y para la transformación en aceite eséncial y la producción de medicamentos y cosmética curativa.
El estado de recolección de palosanto es cuando el árbol está muerto por muerte natural y ya pasaron mínimo tres años de su muerte, es en ese estado que se concentra el mejor aroma.
Se recoleta solo la parte del árbol que tenga madera, incluido pequeñas ramas, dejando la corteza y las partes dañadas sin recolectar por pudrición o insectos.
El palosanto se recolecta en trozos de unos 60 centímetros de largo por 10 de ancho. Esa medida permite que se pueda transportar con comodidad por animales y vehículos. Diariamente un recolector de leña de palo santo puede acarrear unos 60 trozos. La herramienta utilizada es el machete y los sacos para llevar la leña a casa.
La recolección se realiza por la diferenciación del color y consistencia de palo santo, llamándose "hembras" a aquellos arboles muerto cuyo color de la madera es amarilla y su consistencia es dura y pesada. Los "machos" son aquellos que el color de la madera es blanco y su consistencia es frágil hueca y liviana, ambos en porcentuales muy distinta contiene aceite esencial.